martes, 15 de abril de 2014

The walking dead, más real de lo que pensabas

Yo no veo la serie The Walking Dead pero por lo que me han contado se trata de unos muertos vivientes que pululan por ahí aterrorizando a la gente. Con ese título no cabe esperar otra cosa, pero en estos días estuve pensando en la posibilidad de que The Walking Dead pueda ser más que real en un mundo real, en nuestro mundo real, porque aunque parezca imposible no hay más que mirar a nuestro alrededor para encontrarte con más de un vivo que creías muerto. 
Paso a explicarme. 
Hay situaciones que hemos vivido todos alguna vez en nuestra vida que una vez más una de mis amigas me inspira para compartir. Resulta que Marina (mi amiga en cuestión) pasó por unos meses muy complicados. Marina se enamoró, como no, del hombre equivocado. Se enamoró sin realmente buscarlo, incluso evitándolo a toda costa, pero ya sabemos que cuanto más se evite menos se logra. Llena de ilusiones y promesas, Marina se lanza a abandonar toda su vida por el "zombi" pero el "zombi" curtía otro rollo en ese momento, el rollo "si pero no",  por lo que Marina se quedó sola, triste y más muerta que viva. 

Pasado un tiempo, y nada más cierto que "el tiempo lo cura todo", Marina encuentra en su andar las piezas que se le habían caído, empieza a reconstruirse nuevamente, incluso con el esfuerzo de quitarse a la sombra del zombi que la acompaña de vez en cuando en su cabeza. 

Hace ya unos meses Marina se siente más entera, casi del todo recuperada, iniciando un camino nuevo, renovado y luminoso sin zombis a la vista. Pero cuando cree que ya tienes todo bajo control el "zombi" aparece de nuevo pero esta vez no en su cabeza, sino que de forma real, porque los zombis del 2014 tienen la tecnología al alcance de su mano y la utilizan para hacerse notar en el momento menos apropiado, Marina se encuentra al muerto viviente haciendo acto de presencia como si quien no quiere la cosa en modo amigable como si nunca hubiera pasado nada. Y ahí está Marina, que por suerte es más fuerte, pero ahí está pensando en por qué m* los zombis aparecen con la actitud de  "esta todo bien nena, hagamos como que no pasó nada, seamos friends, tengamos un trato cordial ¿vale?, si al final lo nuestro fue una cosa de nada". 

Marina, menos mal que los zombis solo existen en la tele. 



martes, 31 de diciembre de 2013

Pajaritos en la cabeza y masoquismo extremo

Love is in the air, como te habrás dado cuenta, tuvo un parón de muchos meses. Dejé de escribir porque no quería escribir sólo por la presión de que los blogs son como mascotitas a las que hay que alimentar todos los días para que sobrevivan, empecé a sentir que había llegado a un momento donde poco tenía que decir o donde me parecía que no había nada que quería que fuera leído. 

Sin embargo ahora me picó el bichito otra vez, increíblemente hablando con mi abuela, una chica de 73 años a quién tuve que poner al día estas vacaciones, de mi vida. Hablando con ella (en realidad ella habla sin parar y yo de vez en cuando meto algún bocado) me di cuenta que las mujeres tenemos una imaginación imparable y una capacidad para producir pajaritos en la cabeza inimaginable además de combinarlo con un masoquismo extremo. 

Paso a explicar los dos puntos:

1. Pájaros en la cabeza. 
Dícese de la mujer que se imagina una historia con todos los matices habidos y por haber sobre lo que dirá, hará, pensará, sentirá tanto ella como el otro cuando se vuelvan a ver, porque cuidado, para nosotras cuando nos dejan no es un "hasta nunca" es más bien un "see you later alligator". Antes de llegar a ese reencuentro nuestra cabeza ya ha recreado mil y un posibles reencuentros (en invierno, en verano, en un puente, de casualidad por las calles de tu barrio, en el chino de la esquina, no dejamos escenario fuera de las posibilidades) donde podemos poner en palabras todo lo que esperamos que el otro haga y diga, casi siempre con final feliz, y con esto no me refiero a un final de Hollywood (que si lo pensamos es porque seguimos enamoradas hasta las trancas) sino también un final de esos donde nos despachamos a gusto, porque que me diga alguien quién no ha dicho "si me lo encuentro le diría esto, esto y aquello". 

El problema es que cuanto más lo imaginamos menos sucede, o sucede algo totalmente diferente a como lo habías planeado. 
Porque en tu imaginación en ese encuentro con el tío que te dejó, tu estás hecha un figurín recién salido de la peluquería y con ropa que ni siquiera hoy tienes en el armario. Sin embargo y aquí recordando a una de mis profesoras, si el reencuentro se da, ese día estás con el pelo hecho un asco, con tu peor chándal y como en ese instante de desolación solo quieres que te trague la tierra, poco te acuerdas del discurso magistral que tenías preparado. 
Como diría mi abuela: "siempre hay que ir por la vida arreglada que nunca se sabe lo que te puede pasar o con quién te vas a encontrar"

2. Masoquismo extremo
Las mujeres tenemos una capacidad increíble para pensar que el otro cambiará por nosotras. Somos capaces de aguantar al más zapallo de los zapallos sólo porque pensamos que con el tiempo se transformará en el ser que queremos que sea. Repetimos con el mismo capullo una y mil veces hasta que no haya cuerpo, ni mente, ni corazón que lo resista. Podemos tener enfrente a la mejor persona del mundo pero preferimos ir detrás del que nos hizo llorar y sufrir, no me pregunten por qué pero es una realidad que se puede confirmar preguntándole a tu prima, tu vecina, tu maestra, tu madre, la hermana de tu cuñada, a tu abuela y la señora que vende flores en la puerta de tu casa. 
No se si a los hombres les pasa, sé que a todas mis amigas y conocidas les ha pasado alguna vez, eso de sentir que el mal que nos hace determinada relación lo consideramos muy poco respecto a las migajas de amor realmente ofrecido por el otro. 

Como dice mi abuela: "Danielita, las mujeres somos masocas y punto" 


jueves, 26 de septiembre de 2013

El que se va sin que lo tiren, vuelve sin que lo llamen

Hace unas cuantas semanas que no me pongo a escribir, he estado con mucho lío con la academia, pero hoy vuelvo porque hace varios días que me ronda un tema en la cabeza. 
Hay una frase que dice así: "el que se va sin que lo tiren, vuelve sin que lo llamen" y hay otra que dice "si amas déjalo libre, si vuelve a ti es tuyo"...

Sobre la primera frase tengo mucho para demostrar que es bastante cierta pero las mujeres también la usamos para nuestra tranquilidad mental. 
Muchas ex parejas mías, parejas que me había dejado a mi, luego de pasado un tiempo, sobre todo después de que yo ya había superado la pérdida, volvieron a hacer su aparición en mi vida, de una forma muy magistral. Normalmente cuando un ex vuelve a tu vida, lo hace siempre con una metodología bastante currada o al menos llamativa. 

Tengo 3 casos, por un lado mi primer novio, el que me dejó y luego de 3 meses se apareció sin previo aviso en mi fiesta de graduación del instituto, me hice la dura, la interesante, durante algunas horas hasta que el chico en cuestión se dignó a hablarme y por supuesto mi "yo duro e interesante" dejo paso a mi "yo blando, mi yo aquí no pasó nada". 

El segundo caso vino de la mano de mi segundo novio, me dejó para venir para España, justamente cuando en ese momento yo estaba viviendo en Montevideo, su aparición en mi vida se dio como 2 años después que me dejara, yo ya estaba en pareja y recuerdo que me llamó una noche para decirme que quería irse a vivir conmigo a Montevideo, que había pensando mucho en nosotros (claro que mucho, le tomó 2 años) y además dentro de su discurso se le ocurrió decirme que el me amaría siempre incluso si algún día engordaba jajaja, ¡alucinante!. En este caso no di mi brazo a torcer, así que ahora cada uno por su lado, incluso él a los pocos meses de este episodio telefónico, se casó con otra chica. 

El tercer caso es de el primer novio que tuve aquí en España, este chico me dijo que nos fuéramos a vivir juntos y esa misma noche, después de ir a ver camas de dos plazas, me dijo que no era buena idea. Este fue muy persistente en su querer volver conmigo porque incluso pasado 1 y 2 años me llamaba a altas horas de la noche para decirme cuánto me echaba de menos, supongo que sería después de tomarse unas cuantas copas. 

Entonces debo decir que en muchas ocasiones esta frase se aplica, pero ojo que las mujeres también la usamos como para sentirnos mejor. Quién no le ha dicho a su amiga, quién no se ha dicho a si misma "ya se dará cuenta de lo que soy, ya vendrá arrastrándose", en fin que es como una especie de consuelo que usamos en los primeros meses de pérdida. 

Luego está la frase de que lo dejes libre porque si es tuyo volverá...bueno no sé bien que quisieron decir pero realmente pienso que incluso aunque vuelva muchas veces esa persona no es para ti, la mayoría de mis ex han vuelto a mi, hice lo que me dijeron, los dejé libres, pero al final de cuentas no eran míos cuando volvieron o mejor dicho yo ya no era de ellos. Lo mejor de que tus ex vuelvan es la satisfacción de sentir que al final el tío sí que se dio cuenta de que algo una valía y ahí viene él cual perrito faldero para que le des una segunda oportunidad y tu ya estás tan superada de dolor que ya eres tu la que dice "Si te he visto no me acuerdo".




lunes, 16 de septiembre de 2013

La infidelidad en la era informática

Drexler es uno de mis cantantes favoritos, lo considero antes de cantante poeta y sus canciones de alguna manera u otra siempre me cuentan alguna historia donde puedo verme o donde puedo ver cosas que me resultan cercanas a gente que conozco. 

Al final, las canciones nos muestran que todos los seres humanos buscamos y vivimos cosas muy similares. 
Hay una canción de Jorge Drexler que se llama "La infidelidad en la era informática", más allá de mis conclusiones (creo que esta canción la escribió Jorge cuando dejó a su mujer por Leonor Watling) sobre por qué escribió esta canción, esta especie de canción-relato me va a ayudar a escribir sobre un tema que siempre trae controversia: la infidelidad. 

Conozco mucha gente que cuándo le preguntas si perdonaría una infidelidad, te responden un NO más grande que una casa y conozco también quienes ante la misma pregunta te responden un Sí pero tímido y con muchos "siempre y cuando...."
Vamos, que la mayoría de la gente si perdona siempre tiene algún pero escondido: perdonaría si fue sólo sexo,  perdonaría si fue una vez sola, etc, etc, etc, 

Busqué el término en la wikipedia y dice que: 

La infidelidad amorosa, acepción con la que frecuentemente se asocia el término, es descrita, grosso modo, como la falta al pacto normativo que limita el número de personas involucradas en una relación amorosa o erótica y, por tanto, la prohibición de mantener otras de forma paralela, sean ocasionales o continuas. De forma que, en las relaciones con tradición monogámica la inclusión de un tercero supone una violación del acuerdo, mientras que en relaciones poliamorosas se produce al involucrar a personas ajenas al círculo aceptado. Bajo esta definición, ser infieles romper de forma consciente un acuerdo afectivo o sexual preestablecido para el tipo de relación escogida.

Gracias a mi trabajo conozco mucha gente y a veces me pasa que al verlos me hago una idea de vida y resulta que cuando hablo con ellos o profundizo, descubro que mi idea no tenía nada que ver con la realidad, y la infidelidad entra también en estas conclusiones. Cuando profundizo con algunos alumnos sobre ciertos temas como este, descubro que hay mucha gente infiel y que el que no lo ha sido, no es porque lo considere algo malo, sino porque no ha tenido la oportunidad. 

Preguntaba la semana pasada en Facebook si la fidelidad no estaba muy sobrevalorada y no obtuve casi respuestas, supongo que es porque la gente no se atreve a decir mucho lo que realmente piensa. Yo creo que sí lo está, creo que la fidelidad en una pareja se da porque socialmente es lo correcto y porque si por esas cosas de la vida tú le propusieras a tu pareja tener una relación más libre, sabes que puedes perderle, y ante el hecho de perderle prefieres mejor hacer lo que quieres hacer pero sin que el otro se entere. 

Dice Drexler: 
"Aquel mensaje que no debió haber leído, 

  Aquel botón que no debió haber pulsado, 
  Aquel consejo torpemente desoído, 
  Aquel espacio era un espacio privado." 


Soy de las que piensan que ser infiel no debe ser nada fácil, mentir, recordar tus mentiras, pensar que tienes todo bien calculado y que nada se te escapa es bastante trabajoso, citando nuevamente al cantante "Y tarde o temprano nada es secreto. Nada es secreto". 
Recuerdo que hablando con una amiga sobre el tema, me decía que ella no entendía por qué si alguien quería estar con otra persona, no dejaba a su pareja y se iba con la otra persona, pero yo lo que le quería explicar que muchas veces no es que el que es infiel no quiera estar más con su pareja, es que quiere estar con los dos, además de que dejar una relación no es nada fácil y a veces no es que quieras estar con otro, sino que quieres una noche (o varias noches) y nada más. 

El amor, las relaciones, la fidelidad, la infidelidad son complicadas de llevar por el buen camino, me refiero a que para ser infiel hay que valer, primeramente para ser un buen jugador y no dejarse atrapar y después para poder convivir con el otro como si nada, hacer ese trabajo interno de dejar el sentimiento de culpa en el ascensor de camino a tu casa es más difícil que mentir. 







viernes, 13 de septiembre de 2013

Besame mucho

El metro es un sitio lleno de ideas. Por ejemplo ideas para escribir este blog. Siempre que voy en metro miro a la gente e intento imaginarme vidas, historias y muchas veces surgen situaciones inspiradoras, como ayer. 

Eran las 10 de la noche, normalmente salgo a esta hora de trabajar, y en el la línea 10 sube una pareja de chicos jóvenes, adolescentes. Se besan y realmente se me viene a la cabeza la idea que me viene siempre que veo parejas besándose: ver a una pareja besarse apasionadamente es realmente desagradable. 

Quiero decir, cuando vemos una pareja succionándose la boca donde incluso puedes ver más allá de lo que deberías, resulta feo. Toda esa imagen del beso bonito a lo Hollywood se va a un lugar recóndito. Ya sé que para muchos sonaré "abuelita" pero es que no puedo decir más que los besos con lengua en público son un espectáculo bastante feo de presenciar. 

Es claro que cuando uno está besando no se percata de lo que produce en los espectadores y  no nos parece algo feo, todo lo contrario. Esto de ver a alguien besarse a lo loco es como ver a tus padres o abuelos hacerlo....realmente poco motivador. 

Pensaba también qué importante son los besos, el primer beso te dice mucho. Para mi es la prueba fundamental para conectar y para que realmente la química aparezca o desaparezca. Los besos son la puerta que se cierra o se abre. Para mi los buenos besos, transportan, te hacen sentir de pies a cabeza, es como si de repente se cuelan estrellas y te iluminan todo el cuerpo. 

Los buenos besos son como si fueran siempre el primero, es como leí en el libro de Laurie Frankel "Tú, hoy y siempre" "Creo...estoy casi seguro de que este será el último primer beso de mi vida y quería saborearlo"- ¿y qué te ha parecido? - se me ha olvidado. Déjame probar de nuevo. 

Un beso matador te deja con ganas de más, siempre

Me acuerdo que con 15 años la gracia era besar, besar, besar, hasta cansarse. Incluso no había ningún tapujo si te besabas con lengua delante de todos tus amigos que si no tenían pareja no tenían mejor cosa que hacer que mirarte como besabas a tu noviecito. 

También recuerdo que si eras más chica, digamos que en la escuela, los besos definían claramente qué relación tenías con tu compañerito. Un beso en la boca era evidentemente un noviazgo a toda regla, incluso si horas antes lo ignorabas entretenida en parloteos con tus amigas. 

Ya de mayor parece que los besos perdieron su capacidad de definir nada, hoy resulta que un beso no significa nada, vamos, que no se le niega a nadie. Como dice una profesora que trabaja conmigo "cuando eras niña si te besaban sabías que eran novios, hoy compartes una cama y muchas veces te preguntas ¿qué somos?". 

Al final quiero quedarme con la idea de que los besos son el mejor invento para conectarte con el otro, los besos bien dados son el mejor remedio para el dolor y los besos de amor son la forma más bonita de decir te quiero (aunque suene cursi :) )






lunes, 9 de septiembre de 2013

Convivir no tiene sentido

Leí una vez en un libro de Augusto Cury que si querías que tu relación nunca tuviera problemas y que pasara de los malos tragos, lo mejor era nunca convivir y realmente no puedo estar más de acuerdo. 

Cuando estás enamorado y después de un tiempo prudente (en realidad no sé bien cuándo es prudente) deseas compartir las 24 horas del día con esa persona con la que casi siempre pasabas solo los fines de semana. Antes de dar el paso, piensas que no hay nada como vivir con esa persona todo el día, vamos que crees que nada saldrá mal pero la realidad cae al cruzar la puerta y compartir la cama. 

Convivir no es fácil, vamos, no lo es ni con los compañeros de piso, ni con un tu hermano, ni con tu mejor amiga, entonces tu pareja tampoco puede escapar a esta máxima. 
Cuando convives tu y tú pareja están totalmente desnudos y ya hay poco que esconder y pocos lugares donde esconderse (no sólo porque los pisos en Madrid cada día tienen menos metros cuadrados). La convivencia es preciosa pero un trabajo tan complicado como ir a trabajar 8 horas a tu oficina, el trabajo de la convivencia no termina ni cuando estas durmiendo. 

Si convives con alguien, seguro que alguna vez has deseado salir por la puerta a por un cigarrillo y no volver más o deseaste haber conservado tu apartamento de soltero. 

Dice mi madre que lo ideal es tener un día libre o de vivir cada uno por su lado, y lo dice después de 32 años de casada por lo que de verdad para la convivencia solo hay una solución: aguantar+querer+hablar (mucho, hasta repetirse más que el vinagre).




viernes, 6 de septiembre de 2013

Me pica...

Pensaba el otro día que por más que uno conozca personas, hombres y mujeres, siempre hay preguntas que pocos saben darnos respuestas o directamente nadie puede contestarte.
Pienso en esas preguntas que muchas veces les he hecho a mis parejas y al final de cuentas no sabía yo si me decían la verdad o....
Entonces acá tengo mi top 10 de las preguntas que no se responden así como así.
Hombres please help me!, mujeres si ustedes ya saben la respuesta help me too!

1. ¿Es verdad que los hombres las prefieren rubias?

2. ¿Es verdad que los hombres quieren una dama para casarse?

3. ¿Es verdad que los hombres quieren una p... en la cama?

4. ¿Es verdad que para los hombres el físico es lo primero?

5. Los hombres si ven una comedia, ¿es por no hacerle el feo a la chica?

6. ¿Los hombres matarían por estar con una chica que entendiera de fútbol?

7. ¿Es verdad que el sueño de todo hombre es tener un trío con dos chicas?

8. Los hombres aguantan a las amigas de su novia, pero eso de que les caigan bien...

9. ¿Las ex de los amigos están prohibidas?

10. ¿Por sexo hacen cualquier cosa?

y por ahí la dejo que sino de tantas preguntas poca respuestas obtendré....¡Qué ganas!